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José Herrera Peña

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México 2001


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El video

JOSÉ HERRERA PEÑA

18 diciembre 2001. El primer video fue difundido el 8 de octubre, un día después de empezar a caer las bombas norteamericanas sobre Afganistán. Osama Bin Laden jura por Alá que EEUU no conocerá más la seguridad, a menos que la tenga también Palestina. Pues bien, Palestina tiene hoy menos seguridad que nunca y EEUU no ha padecido ya ningún sobresalto, salvo los que le ha causado su propio gobierno.

En aquella ocasión, Bin Laden declaró que los monstruosos atentados en Nueva York y Washington no habían sido planeados por él sino por un “soldado islámico” con el fin de sembrar terror entre los norteamericanos, y agregó que “EEUU está probando hoy lo que hemos probado por decenas de años. Nuestra nación, por más de ochenta años, ha probado este terror. Nuestra gente ha sido aniquilada; nuestra sangre, derramada; nuestras tierras santas, profanadas. Hemos pedido ayuda y no hemos recibido nada”.

Veintiséis días después, durante los cuales el pueblo de Afganistán fue bombardeado sin piedad, día y noche, es decir, el 3 de noviembre, el millonario saudita apareció nuevamente en la televisión. Su nación seguía probando el terror; su gente, siendo aniquilada; su sangre, derramada. Inútil pedir ayuda. ¿A quién? ¿A la ONU, establecida para garantizar la paz y la seguridad en el mundo, que no había alzado su voz contra los bombardeos? ¿A los gobiernos del Islam, supuestamente solidarios con la causa? No, no habría recibido ninguna ayuda, aunque la pidiera.

Por eso, ahora se limitó a señalar, no sin cierto dejo de amargura, que la ONU ha sido responsable por el sufrimiento islámico, desde sus orígenes hasta hoy; que los líderes árabes son “infieles” porque forman parte de tal organización, y que todos son cómplices de los asesinatos y latrocinios que se siguen cometiendo contra el mundo musulmán. "Nosotros hemos sufrido y seguimos sufriendo a causa de la ONU, ya que es un instrumento de crímenes. ¿Quién votó la partición de Palestina en 1947? Las Naciones Unidas. Luego entonces, los que se dicen dirigentes árabes, cuyos países son miembros de la ONU, son infieles que renegaron del Corán y de la tradición del Profeta. Nosotros somos masacrados todos los días y ellas (las Naciones Unidas) no levantan un dedo. Los musulmanes que quieren resolver nuestros problemas en las Naciones Unidas son unos hipócritas. Nuestros sufrimientos vienen de las Naciones Unidas. Ningún musulmán debería estar en dicha organización".

Además, reiteró que él no había sido el autor de los atentados y que EEUU no tenía pruebas que justificaran sus ataques contra Afganistán.

Ahora bien, al transmitirse el primer video, el gobierno norteamericano había sugerido a los medios, con efectos de drástica advertencia, que no difundieran ya los siguientes porque podrían contener mensajes ocultos que, si eran descifrados por células terroristas, realizarían nuevos atentados. Los especialistas de la CIA, hasta la fecha, no han detectado ningún mensaje codificado en el segundo video. De cualquier modo, no sólo las cadenas norteamericanas ABC, CBS, CNN, NBC y FOX, sino las del mundo, ya no pasaron al aire ningún mensaje, salvo el canal de televisión Al-Jazira, perteneciente a un pequeño país de 579 mil habitantes llamado Qatar. Sin embargo, varios días después del segundo video, las instalaciones de Al-Jazira en Kabul fueron bombardeadas “por error”.

Luego, habría un tercer video. Trátase de una entrevista hecha por el corresponsal de la misma televisora qatarí al millonario árabe; pero ésta ya no fue pasada al aire. La televisora lo entregó a las tropas norteamericanas.

Pues bien, el jueves anterior, 13 de diciembre, se dio a conocer un nuevo video. Esta vez fue transmitido, no por alguna cadena norteamericana, ni tampoco por el canal Al-Jazira, sino por el propio Pentágono. Las autoridades señalaron que lo encontraron a fines de noviembre en una casa de Jalalabad y que posiblemente fue grabado unos días antes. El secretario de Defensa aseguró que los expertos habían analizado el documento y verificado su autenticidad. Visto por el presidente Bush el 30 de noviembre, se autorizó su difusión mundial para probar que el millonario saudita es plenamente responsable de los crímenes del 11 de septiembre.

Al conocer el video, que por cierto no tuvo mucha audiencia, los países musulmanes reaccionaron con una gran dosis de escepticismo. Muchos aseguran, como Hany al Sobai, por ejemplo, director del centro integrista islámico londinense Al-Maqrizy, que fue manipulado. "El lugar es dudoso. Los rostros y voces de Bin Laden, sus hijos y su lugarteniente Ayman al Zawahri -dirigente de la Jihad egipcia- no corresponden a la realidad. Están montados”. Hasta miembros de la propia familia materna de Osama Bin Laden expresaron que no pueden asegurar que se trata de él o de alguien que se le parece.

Los únicos que han omitido pronunciarse sobre la autenticidad o no del video son los del canal Al-Jazira, lo cual no deja de ser curioso. Pero suponiendo que la cinta no esté trucada, lo único que prueba es el bajo nivel de los sistemas de información norteamericanos. ¿Cómo es posible que uno de los personajes que participan en el diálogo, un sheik o jeque "paralizado desde la cintura para abajo", haya podido llegar (a pesar de sus limitaciones) hasta el lugar donde se encontraba Osama Bin Laden, no así todo un imperio (a pesar de sus recursos y alcances) que lo sigue buscando infructuosamente?

Por otra parte, suponiendo que Osama Bin Laden haya efectivamente reconocido hasta mediados de noviembre su culpabilidad en los actos terroristas, ¿cómo es posible que el gobierno de EEUU, sin pruebas, haya decidido bombardear a un miserable pueblo y hecho millares de víctimas, con base en simples sospechas? ¿Y si Osama no hubiera reconocido su presunta responsabilidad? ¿Cómo habría justificado el horroroso baño de sangre causado en Afganistán?

Por lo demás, las escenas del video se prestan a dudas de tiempo, forma y circunstancias. ¿Cómo es posible pensar que el grupo que se reunió en una atmósfera siniestra con Osama se haya regocijado de los acontecimientos del 11 de septiembre hasta dos meses después? ¿No es un poco anacrónico? ¿Cómo es posible concebir incluso que haya habido regocijo en un grupo cuyo país ha sido y sigue siendo bombardeado sin clemencia y sin descanso, día y noche, y que ha visto la pérdida de miles de vidas humanas, incluyendo las de algunos de sus seres queridos, como la del hijo del mulláh Omar? ¿No es un poco incongruente? ¿Cómo es posible imaginar regocijo en un hombre como Osama Bin Laden, que pocos días antes había acusado dramáticamente ante las pantallas de Al-Jazira a la ONU por permitir las masacres en Afganistán y a los gobernantes islámicos por ser unos traidores y haberlo dejado aislado y solo? ¿No es un poco forzado?

Lo peor del caso es que, aunque el último video sea auténtico, y a pesar de lo que afirman las autoridades norteamericanas, Osama Bin Laden no reconoce en él más de lo que que ya había admitido desde el primero, difundido el 8 de octubre. Por consiguiente, es un video que no disipa ninguna duda. Al contrario. Si se observa bien, crea más.

jherrerapen@hotmail.com


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